miércoles, 5 de noviembre de 2008

Susan quiere votar


Los hombres: sus derechos y nada más. Las mujeres: sus derechos y nada menos (Susan B. Anthony)

Más sobre el tema del momento. Este mismo día, pero en 1872, la activista Susan B. Anthony (Massachusetts, 1820 – Nueva York, 1906) fue arrestada por votar en las elecciones presidenciales estadounidenses, cuyo ganador aquella vez fue el republicano Ulysses S. Grant.

El motivo de su arresto fue que había infringido la ley, pues las mujeres no tenían el derecho al voto. No obstante, Susan B. Anthony aseguraba acogerse a la 14º Enmienda de la Constitución de su país, que dice que “todas las personas nacidas en EEUU son ciudadanas y no se les pueden negar los privilegios de la ciudadanía.” ¿No somos las mujeres, pues, personas?, reclamaba esta admirable mujer.

El juicio fue largo, Susan B. Anthony pronunció en él palabras que pasaron a la historia. De nada sirvió su racional defensa, pues fue declarada culpable y también multada, aunque siempre se negó a pagar esta multa.

La vida de Susan B. Anthony es apasionante y daría para un libro (de hecho, cuenta con varias y muy buenas biografías publicadas). Ejerció de profesora y luego de directora en un colegio. Allí luchó por que las maestras tuvieran el mismo salario que sus homólogos masculinos. Asimismo, militó contra el abuso del alcohol y la esclavitud.

En 1851 conoció a la feminista Elizabeth Cady Stanton, con quien mantuvo una sólida amistad durante toda su vida. Juntas lucharon por los derechos de las mujeres y participaron en la convención de Seneca Falls, donde se sentaron muchas de las bases del feminismo moderno.

Susan B. Anthony se alejó del movimiento abolicionista cuando éste apoyó la 15º Enmienda que otorgaba a los negros varones el derecho al voto, pero no a las mujeres (ni negras ni de ninguna otra raza).

En 1868 empezó a publicar una revista semanal, The Revolution, en la que se reivindicaba el sufragio femenino y de las personas negras, la igualdad salarial, unas leyes de divorcio más liberales y se criticaba la posición de la iglesia con respecto a las mujeres y la necesidad que tenían las mujeres de abortar por no tener otras opciones (ella estaba en contra del aborto porque en el siglo XIX era una intervención muy peligrosa).

Durante toda su vida, luchó por el acceso de las mujeres a la educación. En colaboración con su amiga Stanton, con la mujer que se ocupó de su defensa en el juicio por haber osado votar (Matilda Joslyn Gage) y con la sufragista Ida Husted Harper, escribió una historia sobre el sufragio femenino en cuatro volúmenes. También con Stanton, fundó la NWSA (Asociación Nacional por el Sufragio Femenino).

Susan B. Anthony murió catorce años antes de que se fallase la 19º Enmienda, pero este hito no hubiera sido posible sin ella, ni las mujeres que votaron ayer hubieran podido ejercer su derecho sin esta heroína decimonónica.

12 comentarios:

farala dijo...

pero estás decidida a que me exalte con arrebatos bollofeministas, cuando estoy en plena fase ligoteo???? (vaaale, que quedan 11 días y hoy verdaderamente es el pricipio de una nueva era...) ¡viva susan! y ¡viva su novia la stanton!, ¡¡¡vivaaaaaaaaaa!!!

Anónimo dijo...

Farala, please, ¿eran novias de verdad? Llevo toda la mañana preguntándomelo... Ains, tengo que pillarme por ahí alguna biografía que hable de esto. Por cierto, puedes ligotear todo lo que quieras y seguir siendo feminista... jajajaja...

Anónimo dijo...

Lo que sin duda alguna eran es un "Boston marriage" :-)

Anónimo dijo...

¿cómo el mío?
gracias por la historia de Susan, como ignorante que soy no la conocía...
igual que tampoco sé ¿para qué quedan 11 días?
definitivamente soy una ignorante, menos mal que leer vuestros blogs me ilustra "algo"
besos

Anónimo dijo...

Bostoniana, hija, lo de los 11 días tiene telita, normal que no te enteres de nada, es una de esas locuras de Farala que mejor te cuenta ella.
Y sí, definitivamente el matrimonio de Susan B. Anthony era tan bostoniano como el tuyo :-)

farala dijo...

Lillian Faderman las incluye a las dos en su libro To believe in women : what lesbians have done for America--a history / Lillian Faderman. Boston : Houghton Mifflin, 1999. y yo a esta señora la respeto mucho.... (claro que hay tambien una pagina en español de una fundamentalista religiosa que pone a la stanton como una martir de la fe.
bostoniana, ve a mi blog, asi te enteras de todo y de paso déjame un comentario, plis.

Anónimo dijo...

Jjajaa, aquí la que no llora no mama, ¿no?
Muchas gracias por lo de Lillian Faderman y por cierto, ¿tienes ese libro?

Marcela dijo...

Siempre me ha llamado la atención la valentía de algunas mujeres, ojalá tuviera yo la mitad de su valor algunas veces.

dintel dijo...

Sigo leyéndote con interés.

Cabiria Rausell dijo...

Seguro que estas dos mujeres vivían una historia de amor lésbico tipo las historias de Sarah Waters...Bravo por todas las sufragistas que lucharon por reconocer el derecho de voto, que en países europeos como en Suiza no se reconoció hasta 1971. La primera abogada suiza, Emilie Kempin-Spyri reclamó que en el artículo de la Constitución Federal con el título «Todos los suizos son iguales ante la ley» también se incluyesen a las mujeres, sin embargo hasta la década de los sententa las mujeres suizas no pudieron ejercer su derecho al voto.

Anónimo dijo...

Lo de suiza es realmente increíble, Cabiria.

Ripley dijo...

Mujeres como Susaa B Anthony han hecho que hoy disfrutemos de una vida y unos derechos mucho mejores, aún queda camino, demasiado, por hacer y afortunadamente, también valientes como ella. Supongo que más de una y dos de ellas eran lesbianas, pero eso ya es otra historia y yo también creo que su "amistad" con Elizabeth era algo más. un saludo