viernes, 31 de julio de 2009

Cumpleaños muggle y mágico

La buena literatura infantil no solo le gusta al niño que hay dentro del adulto, sino también al adulto que hay dentro del niño (Richmond Public Schools)

Hoy es el cumpleaños de J. K. Rowling (31 de julio de 1965), autora de la serie de libros de Harry Potter, de la que soy una tenaz entusiasta. Echo de menos los veranos en los que salía su nueva entrega y mi amiga Sila y yo íbamos ansiosas a comprarla a cualquier librería que vendiese libros en inglés. Después cada una se iba a su casa y nos poníamos a leer. Sin duda, ¡uno de los mejores momentos del año! A cada rato nos mandábamos mensajes con el móvil del tipo “voy por la página 134” o “qué fuerte lo que le pasa a Hermione”. En esa época la cotidianidad era una molestia: tener que comer, socializar o trabajar suponía desviarse de esa historia mágica y oscura al mismo tiempo.

Además de haber conseguido enganchar a la lectura a un montón de niños y niñas que no habían tocado un libro antes, admiro a J. K. por haber sido capaz de crear un universo complejo y apasionante y unos personajes que, por muy magos que sean, poseen toda la humanidad de quien se contradice y, como dice el viejo Walt Whitman, es habitado por multitudes.

J. K. Rowling también decidió que hoy sería el cumpleaños de su héroe, Harry Potter (31 de julio de 1980). Por tanto, podríamos decir que hoy es el bloomsday (evento anual que conmemora el Ulises de James Joyce) de los potterheads (fans de la heptalogía de Harry Potter).

¡FELICIDADES ROWLING Y POTTER!

4 comentarios:

Marcela dijo...

en esta lectura me pillas fuera de juego, no pude con la primera entrega y ya no seguí intentándolo, en fin, cosas de gustos. Que disfrutes de muchas lecturas que te gusten tanto como esta.

Claude dijo...

Súper fan soy del pequeño mago, súper fan.

dintel dijo...

Pues yo pude con todos, y tengo previsto su lectura seguida, que no lo he hecho aún. Cuando salían, en castella (es conocida mi limitación lingüística), me los compraba el mismo día. Y en poco tiempo, un par de días a lo sumo, ya me los había leído. Era casi como cuando llega el viernes, de pequeña, y mis padres me daban la semanada para poder ir a comprarme los libros de los cinco. Me llegaba para cuatro (en aquella época costaban 25 ptas). El lunes ya me los había leído todos y tenía que esperar a que fuera de nuevo viernes. ¿Cómo se puede explicar el placer de leer a alguien que no lo siente?

Anónimo dijo...

Pues si te gusta Harry Pooter te recomiendo la triologia de Cornelia Funke, corazón de tinta, sangre de tinta y muerte de tinta.
Es la misma sensación....
Esperoq eu te gusten